Las falsificaciones en el sector de la perfumería, la cosmética y el farmacéutico son un grave problema al que la industria intenta poner todas las trabas posibles. En un entorno en el que los falsificadores mejoran sus técnicas día a día, la búsqueda de métodos que garanticen a los consumidores que el producto que compran es auténtico es un trabajo sin fin que requiere un esfuerzo continuo.
El sector farmacéutico ya está trabajando en una regulación comunitaria que se implantará principios de 2019 y que tiene como objetivo minimizar la falsificación de medicamentos desde su producción hasta que se dispensan a los consumidores. El trabajo no está terminado y todavía hace falta dejar de lado las normativas individuales de cada país para llegar a acuerdos globales, pero todo indica que esta regulación se basará en dos dispositivos: un identificador único para cada envase y un dispositivo contra manipulaciones que garantice que nadie ha podido abrir la caja y cambiar su contenido.
La industria coincide en que es fundamental garantizar la seguridad en todos los productos que pueden poner en riesgo la salud de los consumidores, especialmente los sanitarios, pero no deja de lado otros sectores como la perfumería o la cosmética.
“Los fabricantes de packaging diseñamos y aplicamos sistemas antifalsificación desde hace muchos años”, explica Alejandro García, director general de Drimpak. Trabajando codo con codo con los clientes se han conseguido métodos que han garantizado la trazabilidad y la seguridad.
Entre esos métodos se encuentran las codificaciones invisibles realizadas con una gama de tintas especiales que en la mayoría de los casos se aplican con tecnología de impresión inkjet. Los sistemas de detección de estas tintas se encuentran exclusivamente al alcance de los propietarios de la marca, lo cual les garantiza la rápida detección de unidades falsificadas; o incluso por técnicas de geolocalización, que permiten conocer si el producto se está comercializando en el destino correcto.
A corto plazo se está trabajando en técnicas por medio de las cuales sea el propio usuario final quien pueda verificar la autenticidad de un producto a través del packaging, de forma que se eviten las dudas sobre la autenticidad de cualquier producto.
Drimpak dispone de la maquinaria necesaria para la aplicación de las diferentes técnicas para securizar los productos. Desde el año 2000 se vienen utilizando principalmente en el packaging correspondiente a los sectores de perfumería y cosmética, pero en breve se aplicará en otros sectores del mercado . En todos los casos se trabaja con acuerdos de confidencialidad que garanticen que el know-how de las técnicas empleadas esta salvaguardado de terceros.
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